1. Mezcla el queso de untar con la pasta de trufa hasta obtener una crema homogénea.
2. Unta esta mezcla sobre dos rebanadas de pan de molde o brioche.
3. Coloca la mortadela sobre una de las rebanadas y cierra el sándwich.
4. Unta mantequilla por ambas caras del sándwich y tuéstalo en la plancha hasta que quede dorado.
5. Aliña la rúcula con aceite de oliva virgen extra y una pizca de sal.
6. Añádela dentro del sándwich o sírvela como guarnición.

• Usa pan brioche para una textura más tierna y un sabor ligeramente dulce.
• Si prefieres un toque crujiente, puedes añadir unas lascas finas de parmesano justo antes de tostar.
• Acompaña con una copa de vino blanco joven o un vermut frío para potenciar el sabor de la trufa.

El sándwich tipo “bikini” tiene su origen en Barcelona, aunque se inspira en los clásicos panini italianos. La versión con trufa y mortadela nace en la cocina moderna italiana, que combina productos tradicionales con ingredientes gourmet para reinventar platos cotidianos.