- 400 g de carrilleras de cerdo ibérico
- 300 g de setas portobello
- 2 cebollas
- 3 dientes de ajo
- 2 zanahorias
- 330 ml de vino tinto
- Marca las carrilleras por ambos lados y resérvalas.
- En el mismo aceite, sofríe las cebollas picadas, los ajos laminados y las zanahorias troceadas hasta que doren.
- Incorpora de nuevo las carrilleras y moja con el vino tinto. Deja reducir hasta que el alcohol se evapore por completo.
- Añade 3 litros de agua y una pizca de sal. Cocina a fuego medio-alto durante 1 hora con la tapa puesta.
- Pasado el tiempo, añade las patatas troceadas y los portobellos. Cocina 30 minutos más sin tapa.
- Cuela el caldo, redúcelo en una sartén hasta que espese y vuelve a incorporarlo al guiso antes de servir.
- Usa vino tinto con cuerpo, como un tempranillo o un ribera del duero, para potenciar el sabor del guiso.
- Si quieres una textura aún más melosa, cocina las carrilleras 15 minutos extra a fuego lento.
- Puedes espesar la salsa añadiendo una cucharadita de maicena disuelta en agua fría al final de la cocción.
Las carrilleras eran antaño un corte poco valorado, típico de la cocina humilde, pero hoy se han convertido en una joya de la gastronomía española. Su popularidad creció gracias a la cocina de autor, que rescató este producto por su sabor intenso y su textura única cuando se cocina a baja temperatura.
Hidratos 18 g
Proteínas 45 g
Grasas 25 g
Fibra 3 g








