- 2 panes de brioche alargados
- 200 g de pechuga de pollo
- Pan rallado
- 1 huevo batido
- Aceite para freír
Para el queso de untar:
- 100 g de queso crema
- 1 cda de cebolla roja encurtida picada
- 1 cda de pepinillos en vinagre picados
- 1 cda de cebollino fresco picado
Para la vinagreta:
- 1 cda de mostaza antigua
- 1 cda de miel
- 1 cda de cebollino picado
- Mezcla el queso crema con la cebolla encurtida, los pepinillos y el cebollino hasta obtener una crema homogénea. Reserva en frío.
- Corta la pechuga en tiras gruesas, sazona y pásalas por huevo batido y pan rallado. Fríe en aceite caliente hasta dorar. Escurre sobre papel.
- Mezcla en un cuenco la mostaza antigua, la miel y el cebollino para preparar la vinagreta.
- Abre los brioches realizando un corte superior sin llegar al fondo. Rellénalos con el queso cremoso, añade el pollo frito y termina con la vinagreta por encima.
- Utiliza pan brioche del día para que mantenga su esponjosidad al rellenarlo.
- Añade una pizca de pimentón o curry al pan rallado para potenciar el sabor del pollo.
- Para un acabado aún más crujiente, fríe el pollo en aceite muy caliente (175-180 ºC).
- Si quieres un brioche más fresco, añade unas hojas de rúcula o canónigos antes de colocar el pollo.
- Deja reposar el pollo frito 2 minutos antes de montarlo; así conservará el crujiente sin humedecer el brioche.
El brioche, de origen francés, se utilizaba tradicionalmente en repostería, pero su uso en propuestas saladas ha crecido mucho en los últimos años, especialmente en bocadillos gourmet y hamburguesas premium. Hoy es un básico en la cocina moderna gracias a su textura suave y su sabor ligeramente dulce.
Hidratos 43 g
Proteínas 29 g
Grasas 35 g
Fibra 2 g











